El agro dejó de ser sinónimo de campo y maquinaria para convertirse en un terreno fértil para la tecnología y la innovación. Desde el manejo de los recursos (especialmente el agua, que escasea en gran parte de la región) hasta el poder analizar los datos para encontrar el mejor momento para sembrar y cosechar, todo esto está reinventando a esta industria que hasta hace poco se podía definir como tradicional.
Actualmente, en ese cruce entre tradición y disrupción nacen las agtech, empresas que combinan agricultura con tecnología para hacerla más eficiente, sustentable y rentable.
Y con ellas, crece la demanda de nuevos perfiles profesionales, que no solo conozcan de software, datos y automatización, sino que también comprendan la lógica del negocio agropecuario.
Tradición y datos
Hoy las agtech están en plena expansión y requieren talentos que puedan operar en la intersección entre la tecnología, los datos y el agro. Se buscan sobre todo perfiles tecnológicos con sensibilidad productiva, y perfiles del agro con formación digital o disposición al aprendizaje.
Entre los puestos más demandados se destacan los siguientes:
- Desarrolladores de software (back-end, front-end, full stack): para crear plataformas de gestión de cultivos, trazabilidad, monitoreo satelital o Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés) en maquinaria.
- Especialistas en datos: analistas, ingenieros y científicos de datos, con foco en interpretar grandes volúmenes de información productiva, climática, genética o comercial.
- Ingenieros agrónomos con perfil tech: profesionales que entiendan de suelos, siembras y plagas, pero que también sepan usar herramientas digitales y colaborar con equipos interdisciplinarios.
- Expertos en geolocalización, GIS y teledetección: son perfiles clave para el análisis satelital y la agricultura de precisión.
- Especialistas en IA y machine learning: estos talentos deben poder aplicar modelos predictivos sobre rinde, clima, salud del suelo o riesgos.
- Técnicos en hardware y conectividad: profesionales que trabajen sobre el terreno instalando sensores, estaciones meteorológicas o sistemas de riego automatizado.
- Perfiles comerciales con visión tech: que sean capaces de llevar estas soluciones a productores, cooperativas o grandes empresas del agro, con una comunicación clara y empática.
Jugadores clave
En toda América Latina, donde predomina la industria agropecuaria, es importante tener noción de cómo evoluciona el negocio y los nuevos requerimientos. ¿Por qué? Es que es esencial ir formando a los talentos que le darán una mayor productividad e innovación a uno de los motores de las economías de la región.
En este sentido, las agtech también valoran enormemente las habilidades blandas. ¿Cuáles? Capacidad de adaptación, trabajo colaborativo, pensamiento crítico y apertura al aprendizaje constante. En un sector donde conviven saberes tradicionales con tecnologías emergentes, la capacidad de traducir lenguajes —literal y simbólicamente— es un activo clave.
En definitiva, el mundo agtech no solo está cambiando la forma en que se produce, sino también el tipo de talento que se necesita para hacerlo posible. Y para quienes tengan la capacidad de unir lo tecnológico con lo productivo, el campo se abre como un espacio lleno de oportunidades.