Una mala experiencia puede dañar la reputación de una marca. Esto sucede cuando un producto fracasa o cuando se tiene una mala experiencia como cliente.
Para las empresas, el cómo son tratados los candidatos durante el proceso de reclutamiento también crea un círculo de retroalimentación que puede ser positiva o negativa. Un episodio reciente del podcast “Transformando el Talento” reiteró cómo las empresas pueden minimizar la negatividad para los candidatos que no son contratados, e incluso reforzar su buena reputación a través de un proceso de trabajo empático.
TENGA UN PLAN PARA LOS QUE NO SON CONTRATADOS
En cualquier bolsa de trabajo, casi el 98% de aquellos que aplican, no serán contratados para el rol en cuestión. Mientras más popular sea la marca, mayores probabilidades habrá de que los candidatos apliquen y se sientan decepcionados al no ser seleccionados. Esto significa que la mayoría de aquellos que tienen puntos de contacto con su empresa no escucharán lo que desean, e incluso tendrán una impresión negativa duradera de su marca. Las empresas pueden evitar esto al preparar un plan de comunicación con planeación de tiempos, respetuoso y que valore la inteligencia del candidato. Aplicar un plan de comunicación con cada candidato le ayudará a mitigar percepciones negativas.
Sea receptivo
Lo más importante que una empresa puede hacer con los candidatos es simple: ser sincero. Las empresas crean daños autoinfligidos si no se comunican los candidatos en absoluto, especialmente si los candidatos pasaron horas solicitando. “Algunas de las peores historias son simplemente que los candidatos no obtienen ninguna información”, dice Daniel Birkholm, director ejecutivo y cofundador de la plataforma de comentarios de candidatos Talenthub.io. “Lo mínimo que puede hacer como empresa cuando un candidato solicita un trabajo es volver a ellos.”
Mejorar el proceso de aplicación
Las empresas hacen todo lo posible para asegurarse de que los clientes tengan una experiencia positiva con sus productos, ya sea creando un sitio web fácil de navegar o brindando respuestas rápidas a las preguntas de los clientes. Los candidatos de trabajo también son clientes potenciales (o actuales), por lo que poner el mismo cuidado en el proceso de solicitud de empleo también puede mejorar (o restarle valor) a la reputación de una marca. "Las cosas desde la facilidad de uso cuando se aplica a la transparencia durante el proceso, el establecimiento de expectativas" son importantes para las percepciones de los candidatos, dice Birkholm.
Brindar trato VIP a los finalistas
Los candidatos que llegan a la ronda final, pero que simplemente no son los adecuados en este momento, tienen la mayor afinidad potencial y se adaptan a su organización. Incluso pueden volver a desempeñar otro papel en el futuro. Debido a esto, estos candidatos elevados requieren un trato aún más personal, que puede incluir comentarios personales. Una empresa, por ejemplo, entregó cupones de compra a todos sus finalistas, en reconocimiento al valor y tiempo que brindaron.
